En el MERCADO DE TRABAJO, como ocurre con todos los mercados de factores, las familias son quienes poseen el objeto de intercambio (su propio esfuerzo) y las empresas son quienes están dispuestas a pagar un precio por obtenerlo. De nuevo se puede formular como un intercambio entre OFERTA (número de horas que las familias están dispuestas a trabajar) y DEMANDA (número de horas que las empresas necesitan cubrir). La CANTIDAD “q” se refiere a horas de esfuerzo personal y el PRECIO “p” toma el nombre de salario o sueldo. Ambos conceptos no son exactamente sinónimos:
El mejor instrumento para reflejar la evolución de los salarios es el ÍNDICE DE PRECIOS DEL TRABAJO. Es elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y es más preciso porque elimina en su cálculo las retribuciones de las personas que abandonan el mercado (p.ej. aquellas con sueldos mínimos que son las primeras en ser despedidas cuando llega una crisis económica). Este cálculo debe ser comparado constantemente con el índice de precios al consumo para saber si las personas están actualizando sus salarios al mismo ritmo que la inflación. En los últimos años se pierde poder adquisitivo.
Las HORAS DE TRABAJO ofertadas dependen del tamaño de la población activa pero también de sus ‘ganas’ porque hay un fuerte coste de oportunidad (¿prefiero trabajar mucho para cobrar más? ¿o trabajar menos para disfrutar del tiempo libre?). Por el lado de las empresas, las horas de trabajo demandadas dependen de que cada nueva persona contratada suponga un coste menor adicional que el aumento de producción que genera (productividad). En ambos colectivos el salario es una magnitud fundamental para tomar decisiones.
Algunas propuestas políticas abogan por la JORNADA LABORAL DE 4 DÍAS:
Las personas que entran en el mundo laboral pueden elegir entre 3 TIPOS DE EMPLEO:
– POR CUENTA PROPIA o ‘trabajo autónomo’. Ventajas: independencia, motivación y quizás más beneficio. Desventajas: riesgos, mucha dedicación e ingresos inestables.
– POR CUENTA AJENA o ‘trabajo asalariado’. Ventajas: seguridad, dedicación concreta e ingresos estables. Desventajas: asumir órdenes, menor motivación y menores ingresos.
– EMPLEO PÚBLICO si se trabaja para una administración (con distintas figuras como ‘funcionario’, ‘personal laboral’, ‘personal eventual’, ‘cargo público’, ‘cargo de confianza’, etc.). La principal ventaja es la estabilidad del personal ‘funcionario de carrera’ porque el nombramiento es indefinido. Para lograr una plaza ‘en propiedad’ es necesario competir con el resto de personas candidatas y obtener las notas más altas ante un tribunal que valora objetivamente los principios de igualdad, mérito y capacidad.
En el caso del trabajo por cuenta ajena, se pueden firmar distintos TIPOS DE CONTRATOS:
Son TRABAJOS NO REMUNERADOS las tareas domésticos y de cuidados, que son imprescindibles para que la economía sea productiva, pero que no tienen un salario, y por tanto no cotizan a la seguridad social y no generan derechos para cobrar una pensión contributiva.
La PRECARIEDAD LABORAL es la situación en la que, pese a tener un puesto de trabajo, no existe un equilibrio entre el esfuerzo realizado y la retribución percibida. También se asocia a condiciones de incertidumbre e inseguridad que no garantizan unos ingresos estables o suficientes para desarrollar un proyecto de vida personal y familiar, y también aumenta el riesgo de padecer problemas mentales. Son TRABAJOS PRECARIOS aquellos con:
Son FALSOS AUTÓNOMOS quienes pagan sus propias cotizaciones a la S.S. pero actúan de facto como si fueran empleados por cuenta ajena: están bajo las órdenes de una empresa, usan los medios de la empresa, y cumplen un horario determinado. Es un FRAUDE DE LEY porque tienen sufren los inconvenientes de ambas figuras y ninguna ventaja: no negocian el salario, ni vacaciones, ni despidos…
El sistema capitalista promueve que compremos tecnología de forma compulsiva a multinacionales que degradan por completo los derechos humanos en otros países, y por tanto, nos podemos considerar CÓMPLICES DEL TRABAJO ESCLAVO:
La ECONOMÍA SOCIAL es una oportunidad real para general empleo con valores
Ejemplo del método de cálculo del ÍNDICE DE PRECIOS DEL TRABAJO
Calculamos el precio de nuestro tiempo
< Cada estudiante escribe dos tareas y el sueldo que querría tener por hacerlas. >
1. Indica una tarea/profesión que te gusta y qué precio mínimo cobrarías por hora.
2. Indica otra que te disgusta mucho y el precio mínimo que te convencería para aceptar.
3. Vemos cuál es el nivel salarial en este comparador salarial. El resultado está en €/mes y por tanto hay que dividirlo para 176 (22 días/mes y 8 horas/día)
< Leemos en voz alta las aportaciones y debatimos si el precio de otras personas podría ser mayor o menor. Vemos cuál es el nivel salarial en este comparador salarial. El resultado está en €/mes y por tanto hay que dividirlo para 176 (22 días/mes y 8 horas/día) >
Para obtener un empleo, este mismo verano o en el futuro, es necesario que comiences desde ya a sopesar alternativas. Al inicio debes analizar qué coincidencias puede haber entre lo que te gusta, lo que se te da bien, lo que las empresas demandan y lo que puedes aportar a la sociedad y al planeta.
A. Analiza cuales son las destrezas y conocimientos en los que destacas positivamente.
B. Describe qué actividades y temas se encuentran entre tus preferidas y explica si coinciden con el apartado A.
C. Reflexiona sobre los aspectos más urgentes que, en tu opinión, deben ser mejorados en la naturaleza y en la ciudadanía de tu localidad.
D. Debate con tu familia para determinar cuáles de los anteriores aspectos pueden ser los que sean más demandados en las empresas locales y qué profesiones tienen una mayor relación con ellos.
que puede emprender tu centro de estudios
que puede emprender tu Ayuntamiento, tu Gobierno Regional, tu Gobierno Estatal o las Instituciones Internacionales.
2.2 Entender el funcionamiento del mercado y la naturaleza de las transacciones que tienen lugar en él, analizando elementos como la oferta, la demanda, los precios, los tipos de mercado y los agentes implicados y reflexionado sobre su importancia como fuente de mejora económica y social.